Como hijo de Belobog y ejecutor de la voluntad de la Guardiana Suprema, me ofrezco como voluntario para unirme a la Guardia Crinargenta de Belobog.
En nombre de la gloria de la Guardia Crinargenta, juro ante las murallas de la ciudad:
Protegeré siempre el último bastión de la humanidad: Belobog.
Seré leal a Belobog, a los Arquitectos y a los ciudadanos.
Me comportaré con valor, justicia, desinterés y lealtad.
Obedeceré las leyes de la Guardia.
Recordaré el juramento de la Guardia.
Obedeceré las órdenes de la Guardiana.
Preservaré el honor de los Arquitectos.
Cada vez que dé un paso adelante, será hacia el mañana.
Cada vez que me quede quieto, será en formación.
Cada vez que dé un paso atrás, será hacia mi hogar.
Mantendré este juramento mientras la muralla siga firme.
Si rompo este juramento solemne, me presentaré para ser juzgado y castigado por las leyes de Belobog, de la Guardiana Suprema y todos los ciudadanos.